A CADA GENERACION SUS BATALLAS

Hay personas que responsabilizan a sus padres por sus fracasos. Aunque sí existe la influencia paternal y maternal en nosotros, es importante que entendamos lo que dice la palabra con relación a esto.
Dice en Éxodo 20:5, que Dios visita la maldad de los hijos sobre los padres, hasta la tercera y cuarta generación de los que le aborrecen. Pero, en el verso 6, Dios dice: Y hago misericordia a millares, a los que me aman y guardan mis mandamientos.
Según esta escritura, hay un grupo que está bajo las consecuencias de los errores, de las decisiones de sus padres; pero hay un grupo que alcanza misericordia. Para ti no debe aplicar el verso 5, sino el 6. Tú debes estar en los que alcanzan misericordia ante Dios.
¿Quiere esto decir que Dios hace a los hijos responsables de las decisiones de sus padres? No. Con este principio, Dios no está diciendo que él va a hacer que tus hijos paguen por las cosas que tú hiciste; o que te va a hacer pagar a ti por los errores de tus padres, tus abuelos y bisabuelos. Esto no quiere decir que tengas que luchar con los errores de otros y que Dios se vaya a desquitar contigo lo que tus generaciones pasadas hicieron. Ese no es el Dios al que le servimos.
Entonces, ¿por qué tercera y cuarta generación? Cuando Dios dice que visita la tercera y cuarta generación es porque un hombre, por lo general, puede ver hasta la segunda, tercera y cuarta generación. Y Dios dice: Si no te arrepientes, tú vas a ver lo que va a pasar hasta la segunda, tercera y cuarta generación.
El verdadero dolor de una persona es por sus generaciones. Aquellos que tienen hijos, nietos, pueden identificarse con esto. Lo que les pasa a ellos, lo sufren. Y Dios dice, no que él vaya a desquitarse con tus generaciones, sino que tus decisiones afectan tus generaciones, y tú lo vas a ver. Aquellos que pecan, si no se arrepienten, si no alcanzan misericordia, si no buscan misericordia, verán cómo sus decisiones afectan a la tercera y cuarta generación. Y no hay peor paga de un pecado, que ver cómo tus hijos y tus nietos viven las consecuencias de tus malas decisiones.
Tú no fuiste llamado para vivir para una sola generación. Dentro de ti hay generaciones completas. Dentro de ti hay naciones completas. Tus hijos son herencia de Dios, son un privilegio que Dios te ha dado, y tus decisiones hoy están marcando sus vidas.
Si cometiste algún error, ten la capacidad, la valentía de enmendarlo, de hacerlo mejor, de tomar nuevas decisiones para liberar el corazón de esos jóvenes y puedan saber quiénes son en Cristo Jesús. Los enemigos que te ha tocado a ti enfrentar, tienes que destruirlos porque, de lo contrario, tus hijos tendrán que pelear contra ellos. Cada generación debe pelear sus propias batallas, porque no hay recompensa en pelear los enemigos del pasado.

COMO ESAU

Una generación como Esaú es aquella que vive errante toda su vida, buscando satisfacción en aquello que puede alcanzar por sus propias fuerzas.
Algunos estudiosos de la biblia dicen que Esaú siempre estaba en el campo, fuera de su casa, a distancia, porque era un hombre que se dedicaba a la caza.  Tenía que matar y luchar para comer.  Jacob, su hermano gemelo, se crió dentro de la casa de sus padres y solamente criaba para poder comer.  Un hijo que se crió escuchando a su madre decirle que él era el escogido de Dios, como se lo había dicho cuando los tenía en el vientre.  Cuando su padre fue a dar la bendición, Esaú llegó tarde, pues se encontraba fuera de la casa.
Lamentablemente, hoy día también hay personas, generaciones, que se encuentran como Esaú.  No se criaron en la casa de Dios, sino que tenían que luchar y sacrificarse afuera para poder comer y vivir y, cuando llegan a la casa no tienen alguien que les diga quiénes son y lo que Dios quiere hacer con ellos.  No importa si cazas el venado más grande, si cuando regresas a tu casa no hay quién te diga quién eres, sino que hay un vacío en el interior y continúas buscando a alguien que te bendiga.
No podemos negar esta realidad, pero hoy en día Dios te ha traído a la casa para bendecirte, decirte quién tú eres y lo que quiere hacer contigo.  No importa cómo hayas llegado a la casa de Dios, hay algo grande para ti y los tuyos.  Es él quien te dice que no importa lo que hayas cazado, eres especial y tiene complacencia contigo.
Es importante esto porque no importa la composición de tu círculo familiar, Dios tiene propósitos contigo.  Dios quiere definir quién tú eres.  Cuando Dios quiere desatar Su propósito en tu vida, envía a alguien que te lo diga.
Es tu responsabilidad enseñarle esto a los tuyos.  A lo mejor eres soltero y no tienes hijos, pero, como Mardoqueo que le hablaba a Ester lo que Dios quería hacer con ella, con una palabra correcta que tú le digas a los que te rodean, impactas a toda una nación.  Déjale saber a todos los que te rodean quiénes son en Cristo Jesús.  Define a tus hijos, sobrinos, primos, nietos, vecinos, compañeros.  Diles que Dios les ama y tiene propósito con ellos.  Que aunque estén fuera de la casa, como el hijo prodigo, de repente recuerden que son hijos y pueden regresar a la casa de Su padre Celestial.
Como Esaú, ese es el clamor de la gente que lucha y lucha, pero hay un vacío en el interior y buscan a alguien que les bendiga.  Sé parte de una generación que marca a aquellos que le rodean.  Ayuda a levantar gente con definición y propósito en Cristo Jesús.

VIVIENDO AL LíMITE

Job 28:28 Reina-Valera 1960 (RVR1960) 

Y dijo al hombre: He aquí que el temor del Señor es la sabiduría, y el apartarse del mal, la inteligencia

A lo largo de mi vida me he convertido en una persona muy literal o muy textual, es decir, me gusta poner mucha atención a las palabras utilizadas por las personas para luego ligarlas a la intención de su comunicado, esto me ha llevado a aprender que la mayoría de los problemas que tenemos los tenemos o por una mala comunicación o por un mal entendimiento causado por una mala comunicación.  

Uno de esos ejemplos es cuando las personas suelen referirse a situaciones donde han tropezado y luego complementan su comentario con la frase "es asombroso como solo hay una delgada linea entre", y con ello hacen denotar que es muy fácil errar, equivocarse o caer en algo que no es correcto, pero si lo pensamos detenidamente, no es así. 

La cultura americana nos enseño en los 80's el término "living on the edge", que significa viviendo en el límite y eso es algo que nos pone en constante riesgo, primeramente porque no existe tal límite entre lo bueno y lo malo, el bien y el mal no convergen en ninguna parte, no existe un punto donde dejamos de ser buenos para empezar a ser malos, ni existe tal cosa como los niveles de bondad o maldad, imagine usted que Dios fuera un poco bueno y un poco malo!, y muchos dirán "ah! claro, pero eso es Dios, pero los hombres somos distintos!", acaso estas personas ignoran que Dios nos hizo a su imagen y semejanza?, por tal tenemos la misma capacidad de ser completa y absolutamente buenos, como Dios lo es, ya que esto no es una cuestión de actos buenos o malos, sino de una condición del corazón, aquel que tiene un corazón santificado (apartado) puede tener un corazón bueno. 

Que interesante es esto de pensar en la condición del corazón, ya que normalmente todo lo que es malo en nuestra vida, y todo lo que se traduce como pecado, viene de nuestros sentimientos y nuestros pensamientos (los cuales están contenidos en el alma la cual radica en nuestro corazón), eso quiere decir que el pecado no es un acto, sino un pensamiento o un sentimiento, no importa que el acto no sea consumado, por el hecho de habitar en nuestro corazón ya cuenta como tal. Por tanto aquellas personas que se consideran a sí mismas como inteligentes o hábiles por poder jugar con fuego y no quemarse, son exactamente lo contrario, son necias, pues crean un limite entre el bien y el mal que no existe y que con un poco de pecado echan a perder todo lo bueno que hay en sus vidas. 

La cita de hoy nos habla de 2 conceptos muy interesantes sabiduría e inteligencia y nos dicen que aquellos que temen a Dios son sabios, es decir, la el temor tiene que ver con lo conocido, mientras el miedo con lo desconocido, en otras palabras, aquel que conoce a Dios y sabe como reaccionará (teme a Dios), es sabio, por otra parte note como dice aquel "apartarse del mal" y no "vivir del lado del límite del bien", es decir darle la espalda y dejar de coquetear con el pecado, en otras palabras, apartar su mente y sus sentimientos en las cosas de Dios y dejar de pensar en las cosas que nos tientan y le hacen sentir débil, será inteligente. Podemos por tal entender que pensar en pecar es como complotear contra nosotros mismos, ya que vez que dejamos que un pensamiento o sentimiento equivocado nos aborde, perdemos nuestra inteligencia y la pericia para actuar adecuadamente. 

Piense esto, las personas inteligentes siempre están rodeadas de cosas buenas, ya que sus vidas están llenas de pensamientos y sentimientos buenos, esto es universal, aplica para quienes conocen la cita de hoy y quienes no. Habrá personas exitosas quienes tienen pensamientos buenos y malos, pero tarde o temprano la parte errónea de sus pensamientos y sentimientos erróneos les harán caer, a diferencia de aquel que aparta su corazón para Dios, tendrá frutos eternos y siempre frescos, como Dios lo promete.

LA SOBERANIA Y LA CRUCIFIXION

La soberanía de Dios se ve en la muerte de Jesús. Él había vivido su vida en la tierra entre los hombres. Tenía treinta y tres años y llegó el tiempo en que debería ser el rey de Israel; así pensaba la gente. Incluso intentaron hacerlo rey por la fuerza (Juan 6:15), pero Él se negó. Así que lo agarraron y lo clavaron en la cruz. 

Una vez oí decir a un predicador y creo que tiene razón que los discípulos nunca pensaron que alguien podría clavar a Jesús en el madero, que ellos nunca creyeron que Jesús podría morir. Ellos creían que este Hombre, este Hombre maravilloso que podía aquietar las olas, sanar a los enfermos, echar fuera al diablo, y hacer ver a los ciegos, no podía morir. O si moría, creían que inmediatamente resucitaría en majestad y sería rey de Israel. Y sin embargo, allí estaba, colgando de una cruz. Fueron y lo bajaron. Con gran tristeza y lágrimas lo envolvieron en su sudario. 

Usaron ungüentos para tratar de darle una especie de embalsamamiento y lo pusieron en la tumba nueva de José. Unos pocos días después, dos hombres andaban solos por el camino a Emaús. Y mientras caminaban, se les acercó un Hombre y les dijo (estoy parafraseando aquí): “¿Por qué se ven tan tristes? ¿Por qué bajan tanto la voz? ¿Por qué parecen tan deprimidos?”. Ellos respondieron: “Tú debes ser extranjero en Jerusalén. ¿No sabes que se levantó un gran profeta y creímos que era el Hijo de Dios? Y no creíamos que pudiera morir, o si moría, creíamos que resucitaría. Este es ya el tercer día y nada ha ocurrido y todas nuestras esperanzas se han derrumbado. No hay nada sino un sombrío desaliento ante nosotros”. Y Él les comenzó a hablar. Mientras hablaba, Él actuaba como si fuera a seguir, así que ellos lo invitaron a quedarse a comer. Cuando Él partió el pan, vieron las marcas de los clavos en sus manos, entonces se miraron y Él desapareció de su vista. Se pusieron de pie de un salto y dijeron: “¿No ardía nuestro corazón . . . ?” (Vea Lucas 24:13–32). 

El Dios todopoderoso vino e hizo el maravilloso milagro de todos los milagros: Él resucitó de la muerte a un Hombre que había muerto y lo glorificó. Y así el Dios Soberano abrió una vez más camino en el torbellino y la tormenta. Hoy estamos entrando en un período de la historia como nunca hubo desde que se enfrentaron Jesucristo y el Imperio romano. El Dios que vivió entonces vive hoy. De modo que no tengo temor ni duda; puedo dormir tranquilamente porque creo que Dios tiene sus planes y los llevará a cabo. ¿Cuáles son los planes de Dios? Por un lado, están las promesas de Dios a Abraham y a Israel. Dios las hizo y Dios las cumplirá. Dios dijo a Abraham que sus descendientes tendrían la tierra. Y le dijo a Israel que Él reinaría sobre la casa de Jacob para siempre. Yo creo que Dios cumplirá sus promesas a Abraham y a Israel. Y no creo que exista ninguna posibilidad de evitar que Dios lo haga. Dios también ha decretado que una compañía de redimidos será llamada y glorificada. 

Después de la Segunda Guerra Mundial, los misioneros comenzaron a decir que quedaban solamente tantos años más para la actividad misionera. Los jóvenes que sentían el llamado al campo misionero no iban porque decían: “¿Qué sentido tiene prepararse para el campo misionero? Parece como si las puertas se estuvieran cerrando, una tras otra”. Pero usted puede estar absolutamente seguro de que Dios es perfectamente libre, en todo lugar, en todo tiempo, de hacer todo lo que Él está dispuesto a hacer, de cumplir sus propósitos. Y uno de sus propósitos es dar a luz un pueblo redimido de toda lengua, pueblo, tribu, nación, color, raza y origen étnico de todo el mundo (Apocalipsis 5:9). Los hará semejantes a su santo Hijo, y serán la novia de su Hijo. Jesucristo, el Hijo de Dios, los presentará al Padre rescatados, redimidos y purificados pues son vírgenes y caminan con el Cordero. Yo creo esto. No creo que las divisiones de la Iglesia, o los falsos “ismos” que están diseminados por todas partes vayan a cambiar o estorbar el propósito de Dios. Él abrirá camino en el torbellino y la tormenta, y las nubes serán el polvo de sus pies. Él también ha decretado que los pecadores serán quitados de la tierra (Salmos 104:35). Los pecadores están bastante arraigados ahora. El crimen organizado opera en los Estados Unidos de costa a costa. Los criminales están tan bien organizados que las autoridades, incluso el FBI, no pueden hacerles frente. Si los arrestan, la Suprema Corte los libera por evidencia insuficiente. El pecado está muy arraigado en el mundo; está organizado como un cáncer que ha comenzado a obrar en el cuerpo de un hombre. He oído del cáncer que se disemina por todo el cuerpo de una persona hasta que sus raíces están en todas partes, como un pulpo. Por supuesto, ese paciente no dura mucho tiempo. Si no fuera porque el Dios soberano gobierna el mundo, esta raza humana no podría durar mucho tiempo. El cáncer de la iniquidad, como una vil enfermedad, tiene sus raíces en todas partes. Pero Dios dice que Él va a sacar de la tierra a los pecadores. Habrá “cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia” (1 Pedro 3:13). Dios ha ordenado que la tierra sea renovada y los pecadores sean quitados. Nada ni nadie puede detener a Dios. 

Usted puede decir: “Dios es bienintencionado, y tiene poder y autoridad, pero alguna circunstancia imprevista puede desbaratar sus planes”. Pero, ¡para Dios no existen las circunstancias imprevistas! Cuando usted comienza una caminata por la manzana, un gato negro puede correr enfrente de usted; un policía puede llamarlo a un lado; usted puede caerse muerto; un automóvil puede subir sobre la vereda y quebrarle una pierna. Usted nunca sabe. Las circunstancias imprevistas están en todas partes rodeándolo a usted y a mí, pero el Dios soberano no sabe de circunstancias imprevistas. Él ha visto el fin desde el principio. Nunca necesita preguntar lo que hay en un hombre; Él conoce a todos los hombres. De modo que no puede haber circunstancias imprevistas. Además no hay accidentes a los ojos de Dios, porque la sabiduría de Dios previene un accidente. Usted puede estar conduciendo por la autopista a cuarenta millas por hora. Un neumático explota y usted cae a una zanja. Alguien no hizo muy bien el neumático y no encajaba. (Solía hacer neumáticos en una fábrica de caucho en Akron, Ohio; con algo de trabajo los poníamos dentro; ¡es un milagro que no explotaran antes de salir de la fábrica!) Pero la sabiduría del Dios todopoderoso nunca tiene un reventón. El Dios todopoderoso sabe lo que está haciendo; Él es absolutamente sabio y no puede haber accidentes. Nadie puede darle una contraorden. Se dice que una de las mayores dificultades durante la Segunda Guerra Mundial fueron las contraórdenes. Tenían generales tan obstinados y estos hombres estaban muy ocupados. Uno daba una orden y otro la contrarrestaba. Usted puede leer registros de eso aquí y allá. Un individuo comienza a hacer algo y otro dice: “¡Espera un momento! Tengo una orden de Fulano de Tal, cancelando eso”. Entonces el otro compañero decía: “Tengo una orden de otra persona diciéndome que lo haga”. Corrían en círculos dando vuelta y vueltas. Pero le pregunto, ¿quién puede contrarrestar una orden dada por el gran Dios todopoderoso? Cuando el Dios soberano dice que tiene que ser de esta manera, es de esa manera ¡y nadie lo puede cambiar! Algunos pueden preguntarse si Dios puede fallar por debilidad. Pero el Dios omnipotente no puede ser débil, porque Dios tiene todo el poder que existe. Las bombas de hidrógeno, las bombas de cobalto, las bombas atómicas y todas las demás, ¡no son nada! Son las canicas con las cuales Dios juega. Dios en su infinita fuerza, sabiduría, autoridad y poder, abre camino en el torbellino y la tormenta. Eso es lo que significa la soberanía. 


¿Qué significa esto para usted y para mí? Significa que si usted se va de la iglesia contrariando la voluntad de Dios y su camino, Dios no quiere que usted haga eso, pero quiere que sea libre de hacerlo. Y cuando usted libremente elige caminar contra la voluntad de Dios, elige libremente ir por el camino de la perdición. Eso se refiere al cielo y al infierno: nadie está en ese lugar por accidente. El infierno está poblado de gente que eligió ir allí. Pueden no haber elegido el destino, pero eligieron ese camino. Ellos están allí porque les gusta el camino que conduce a la oscuridad. Y fueron libres de tomarlo porque el Dios soberano les concedió toda esa libertad. Todo el que está en el cielo está allí porque eligió ir allí. Nadie se despierta encontrándose en el cielo por accidente, diciendo: “Nunca proyecté venir aquí”. ¡No! Se dice que el hombre rico murió y en el infierno levantó sus ojos; el hombre pobre y bueno murió y fue al seno de Abraham (Lucas 16:22–23). Cada uno de ellos fue a donde pertenecía. 

Cuando Judas murió fue “a su propio lugar” (Hechos 1:25). Y cuando Lázaro murió, fue a su lugar: los lugares que habían escogido. Así que recuerde esto: Quienquiera que no esté del lado de Dios está del lado del perdedor. Todo esto se aplica al tema de la consagración y de la vida profunda, de obediencia al Señor. Sonreímos y nos encogemos de hombros y lo hacemos parecer como si fuera opcional; algo que podemos hacer o no, según nos plazca. Pero la consagración a la voluntad de Dios es una necesidad absoluta, si usted va a estar del lado de Dios. Si usted está del lado de Dios, no puede perder; si está del otro lado, no puede ganar. Es tan fácil como eso. No importa qué agradables podamos ser, qué rectos, cuánto demos a las misiones, qué morales seamos, si nos estamos oponiendo a Dios no podemos ganar. Pero si nos rendimos y vamos al lado de Dios, no podemos perder. Un hombre que esté con Dios, no puede perder, porque Dios no puede perder. Dios es el Dios soberano que está abriendo su camino en el torbellino y la tormenta. Y cuando la tormenta acabe y el torbellino de la historia se haya disipado, el Dios que se sienta en el trono con el arco iris alrededor, seguirá estando sentado en ese trono. 

A su lado estará una compañía de redimidos que eligieron seguir el camino de Dios; el cielo no estará lleno de esclavos. No habrá conscriptos marchando en los ejércitos del cielo. Todos estarán allí porque ejercieron su soberana libertad de elegir creer en Jesucristo y rendirse a la voluntad de Dios. El domingo pasado por la noche hablé con un hombre que dijo algo al respecto: “No puedo decirle sí a Dios. No puedo rendirme”. Él es un joven refinado, agradable, e inteligente. Pero no pudo decirle sí a la parte ganadora. Así que le estaba diciendo sí a la parte perdedora. Si usted le dice sí a Dios, no puede perder. Y si usted le dice no a Dios, no puede ganar. Si ese es su problema, usted está luchando con Dios. 

Pregunta: “¿Por qué no soy lleno del Espíritu Santo?”. Es porque está luchando con Dios. Dios quiere que vaya por este camino, pero usted va parte del camino y después se desvía. Siempre hay una controversia allí entre usted y Dios. ¿Está del lado de Dios, completa, enteramente, para siempre? ¿Le ha dado todo a Él: su hogar, su negocio, su escuela, su elección del compañero o compañera de su vida? Elija el camino de Cristo, porque Cristo es Señor y el Señor es soberano. Es tonto elegir cualquier otro camino. Es una locura tratar de pasarse de listo con Dios, tratar de luchar contra Él. “¿Por qué contiendes contra él?” (Job 33:13). - 

FLOR DEL DESIERTO: LA HISTORIA DE WARIS DIRIE


Waris Dirie nació en el seno de una familia nómada musulmana somalí del clan de Darod. Waris significa “Flor del desierto”. Su fecha de nacimiento exacta es desconocida. Nació en 1965. Cuando tenía tres años fue mutilada genitalmente. A la edad de trece años fue entregada a un hombre mucho mayor que ella en un matrimonio arreglado, algo a lo que se oponía, y huyo a través del desierto a la capital de Somalia, Mogadiscio a la casa de su hermana, viviendo más tarde con su tía. 

En 1981 se traslada a vivir a Londres, a casa de su tío, que entonces era embajador de Somalia en Londres, donde trabajó en el servicio de la casa. Cuando su tío tuvo que abandonar Londres, por la guerra civil en Somalia, Waris estuvo viviendo en las calles londinenses y más tarde en una MICA. Trabajó en esa época como empleada de la limpieza en Mc Donald's, donde, por casualidad, fue descubierta por el fotógrafo inglés Terence Donovan cuando tenía 18 años de edad, que la fotografió, con la entonces desconocida modelo Naomi Campbell para la portada del calendario Pirelli de 1987.3 Poco después fue la primera mujer de color que apareció en la portada de Vogue en Europa. Trabajó para Chanel, L’Oréal, Revlon, Versace, Cartier, para la marca Levi’s y muchas otras marcas de ropa. En 1987 aparece en la película de James Bond Alta tensión, con Timothy Dalton.

Continuamente aparece en las pasarelas de moda de Londres, Milán, París y Nueva York. En 1995 la cadena de televisión BBC realiza un documental sobre su vida, Una nómada en Nueva York.

En el año 1997, en la cumbre de su carrera como modelo, en una entrevista con la columnista de la revista Marie Claire Laura Ziv, habla por primera vez sobre su mutilación genital, lo cual recibe la atención de los medios de comunicación de todo el mundo. Ese mismo año fue nombrada Embajadora especial de la ONU contra la mutilación genital femenina. Viaja a Somalia a visitar a su familia en 1997 y 2000 que sufría la guerra civil. En 1998 salió a la venta su libro Flor del Desierto en cual habla, entre otras cosas, de su mutilación. Gracias a que es una persona muy conocida, consigue dar a conocer el problema de la MGF a la luz pública. En 1998 las lectoras americanas de la revista Glamour Magazine la eligen Mujer del año.4 En 1998 Waris Dirie recibe el premio África del gobierno alemán por su trabajo a favor de los derechos de las mujeres africanas.5

En 2001 publica su segundo libro, Amanecer en el Desierto, (Título original: Desert Dawn), por el cual recibe, junto a Paulo Coelho el premio Corine Award por el libro más vendido del año 2002. En 2005 publica Niñas del Desierto para el cual Waris Dirie investiga durante dos años en las principales ciudades europeas la mutilación genital entre las comunidades africanas. Con este libro comienza una campaña a nivel europeo contra la Mutilación Genital Femenina. En 2007 publica Cartas a mi madre que se convertirá en un nuevo éxito de ventas.

En el año 2002 crea la fundación Waris Dirie Foundation en Viena, la cual recolecta dinero para luchar contra la Mutilación Genital, y ayudar a sus víctimas. En 2004 Mijaíl Gorbachov le entrega el premio Women's World Award creado ese mismo año.

Waris abre la conferencia mundial contra la MGF que tiene lugar en Nairobi, donde da a conocer por primera vez el Waris Dirie Manifesto contra la MGF. El presidente de la República de Austria, Heinz Fischer le entregó el premio Arzobispo-Oscar-Romero. En marzo de 2000 recibe la nacionalidad austriaca. El 25 de enero de 2006, Waris Dirie habló en Bruselas con todos los ministros de los estados miembros de la Unión Europea, tras lo cual la Unión europea introduce el tema de la MGF en la Agenda Europea.6 Después de esto se introdujeron en numerosos países europeos medidas contra la mutilación y la prevención de la misma. En 2007 comenzó Waris Dirie una campaña contra la Mutilación Genital junto a Scotland Yard y la BBC en Inglaterra.7

El 12 de julio de 2007 el presidente francés, Nicolas Sarkozy condecora a Waris Dirie, y por primera vez a una mujer por su lucha por los derechos de las mujeres con el Chevalier de la Légion d'Honneur.8 En septiembre de 2007 Waris Dirie recibe de la mano de Christine Egerszegi-Obrist, del parlamento suizo, el galardón Prix des Générations de la World Demographic Association. La cadena de televisión árabe Al Jazeera invitó a Waris Dirie al popular programa con Riz Khan. En este programa, habla, por primera vez, ante una audiencia árabe de más de 100 millones de espectadores sobre el tema tabú de la Mutilación Genital Femenina. A esto le siguió el programa sobre la MGF con Waris Dirie del canal para jóvenes Pan Arabic Youth Channel.9

En marzo de 2008 la UE invitó a Waris al parlamento en Bruselas a un encuentro con la Ministra de Asuntos Exteriores norteamericana Condoleezza Rice. La noche anterior de este encuentro, Waris Dirie desapareció sin dejar rastro, lo que motivó una gran movilización de la policía belga. En la noche del 7 de marzo, un policía la reconoció en las cercanías del Grote Markt en Bruselas. Primeramente declaró no haber encontrado el hotel. Pero el 10 de marzo, su abogado dio a conocer que había sido retenida por un taxista durante los días de su desaparición, el cual la intentó agredir sexualmente.10 11 12 Más tarde recibe en Holanda el premio Martin-Buber-Plakette en Kerkade, Holanda.

En abril de 2008 comenzó el rodaje de la película basada en su libro Flor del Desierto en Djibuti. El rodaje también tuvo lugar a cabo en Nueva York, Berlín y Londres. La película está producida por el ganador del Oscar Peter Herrmann. Waris Dirie es coproductora y su papel lo interpreta la modelo etíope Liya Kebede. Otros de los protagonistas de la película son la ganadora del Globo de Oro Sally Hawkins, Timothy Spall, Meera Syal, Juliet Stevenson y Craig Parkinson. La película se estrenó en otoño de 2009.

Waris viajó durante el rodaje de la película a Djibuti, invitada por el presidente del país, donde habló con los ministros y el presidente sobre la MGF.13

En enero de 2009, Waris fue una de las fundadoras de la fundación PPR Foundation for Women’s Dignity and Rights, junto al icono de los negocios François-Henri Pinault y su mujer Salma Hayek, fundación que recolecta dinero para escuelas y clínicas en Somalia.

LA LAPIDACION DE SORAYA M



La historia transcurre en 1986 cuando el imán Jomeini asumió el poder en Irán. Varado temporalmente en un distante pueblo iraní, Sahebjam, un reportero, es abordado por Zahra, una mujer con una desgarradora historia que contar acerca de su sobrina Soraya y las circunstancias de su sangrienta y cruel muerte el día anterior. Su historia trata de exponer la inhumanidad de la ley islámica y el fundamentalismo islámico

La última y única esperanza de justicia está en manos del periodista, que tiene que escapar con la historia -a riesgo de su propia vida- con el fin de volverse la voz de Soraya y contarle al mundo la violencia brutal de la que fue víctima.

QUE TU ESFUERZO NO SEA EN VANO

Dice la palabra del Señor en Salmos 127 que estaría de más que madrugaras y fueras tarde a reposar, si al llegar a tu casa lo que comes es pan de dolores, puesto que a su amado dará Dios el sueño.
No importa el éxito que un hombre o una mujer tenga, si cuando llega a su casa nada tiene sentido.
No importa lo que puedas alcanzar, lo que puedas lograr, o la composición familiar que tengas, ya seas soltero o casado, no importa el lugar en que te encuentres en medio de tu matrimonio, una de las guerras más grandes que tenemos es levantarnos temprano a trabajar, acostarnos tarde, y todo para haber comido pan de dolores y no poder reposar.
El hogar es el lugar donde deberíamos tener reposo, descanso para recuperar las fuerzas, para volver a salir al otro día a luchar, a trabajar; pero la realidad de muchos es que a veces hay más guerra en el hogar que la que experimentan afuera.
No hace falta estar casado para vivir en guerra. Un soltero puede entrar a su hogar y vivir en tanta desesperación, tanta ansiedad, tantas expectativas incorrectas, que tampoco pueda llegar a su hogar y disfrutar de lo que Dios está haciendo en su vida.
Lo que describe este capítulo 127 del libro de Salmos es la vida de muchas personas. ¿De qué sirve tener el mayor éxito del mundo, si cuando llegas a tu casa no hay paz? Porque entonces lo que nos preguntamos es: ¿Para qué trabajar tanto? ¿Para qué luchar tanto?
Esto no quiere decir que no vaya a haber conflicto en los hogares, o que un soltero no va a enfrentar conflictos, dificultades y situaciones; lo que pasa es que hay que entender ciertos parámetros.
Varias cosas nos dice el salmista en este capítulo. En primer lugar, todos buscamos edificar una casa, y es en vano, si no es Dios quien la edifica. Es en vano si no es Jehová quien te da las herramientas, el fundamento, si no es él quien la edifica.
En segundo lugar, todos buscamos proteger a nuestra familia. Buscamos protección y seguridad; pero nada de lo que tú hagas se puede comparar a la protección espiritual que solo Dios te puede dar. Nada se puede comparar a un hombre, a una mujer que vive de rodillas. Tú puedes tratar de cubrir a tus hijos, cortarles el teléfono, el celular, para que no se conecten con el mundo, pero nada es más poderoso que una familia que viva de rodillas, que envíe la palabra del Señor y que declare la protección sobre su familia.
Hay familiares tuyos que no entienden que la protección que reciben, la reciben porque tú estás en la iglesia, porque estás de rodillas. No hay cinturón de seguridad que pueda proteger a un hijo o a un nieto de un accidente, como la oración de unos padres o de una abuelita. Lo que pasa es que a veces, aun nosotros los creyentes, nos olvidamos de eso y buscamos proteger a nuestros hijos con mejores accesorios de seguridad, olvidando que la protección más grande sobre nuestra familia proviene de Jehová.
Si Jehová no está velando por tu casa, en vano tú estás velando. La biblia dice que, cuando tú estás durmiendo, el poderoso de Israel no descansa, no duerme. Cuando vas a dormir, lo que tienes es que estar seguro que Dios está cuidando de los tuyos.
Envía una oración, envía una palabra, porque no hay nada de lo que tú hagas que vaya a proteger a tu familia, más allá de la cobertura espiritual que tú puedes proveer para ti y para todos los tuyos.

LEVANTATE Y SIGUE

Vivimos en un mundo con pasiones frustradas, pero nosotros los creyentes tenemos que tener la voluntad de seguir.
Hay ciertas cosas que a todos nos frustran en un momento dado. Nos frustra hablarle de Cristo a alguien, y que nada pase en su vida. Hay a quienes les hablamos de metas, de sueños, de visiones, de ideas, y nos frustramos, porque no hay manera de inspirarlos. Y lo único que podemos hacer es seguir.
En Josué 14:8-9, Caleb le dijo a Josué       que, aunque sus hermanos habían hecho desfallecer el corazón del pueblo, él llevó noticias conforme lo sintió en su corazón, y cumplió siguiendo a Jehová su Dios. Entonces, Caleb le recuerda a Josué que Moisés había establecido que la tierra que había pisado la planta de sus pies, sería suya y de su descendencia por herencia perpetua.
Tú tienes que seguir, como lo hizo Caleb. Si no sigues por ti, sigue por los tuyos porque la herencia de tus hijos está en que tú sigas en los caminos del Señor. La herencia de la próxima generación está en que, a pesar de que el corazón de otros desfallezca, tú sigas.
No puede haber espacio en tu vida para que tu corazón desfallezca. Tienes que seguir. Tienes que levantarte del lugar donde te encuentras, y seguir, hasta cumplir lo que Dios te ha prometido.

LA LLAVE DE TU BENDICION

La Biblia dice que lo más importante que debemos guardar en nuestra vida es el corazón.  Debemos siempre de cuidar nuestro corazón.  Dios mira que nuestro corazón este en orden y mira que tengamos las intenciones correctas.  Tener el corazón correcto es importante porque entonces se tiene las actitudes correctas.  Debemos aprender a tomar las acciones correctas por las razones correctas.  Hay quienes toman acciones correctas, pero por razones incorrectas, y por esto hay que guardar el corazón y tener intenciones correctas.
Tener el corazón correcto es lo primero que debemos procurar y es lo más importante, pero para ser agentes de transformación necesitamos mucho más.  Necesitamos tener el deseo que al tener el corazón, podamos exhibir las muestras de éxito, de sanidad, de vida correcta y de bendición ante el mundo.
Con la actitud correcta y corazón correcto, de seguro tenemos el favor de Dios.
Tener el corazón correcto no es el objetivo final.  El corazón correcto es la llave que abre la puerta para entrar en las bendiciones y en la prosperidad que Dios tiene para nosotros.  Esto permite que, sobre tu vida, se desaten los milagros, la prosperidad, las buenas conexiones; que se abran puertas y que Dios te lleve de gloria en gloria y de triunfo en triunfo.  Sin el corazón correcto, por más que luches, no vas a lograr las bendiciones de Dios.
No somos perfectos ni vivimos en un mundo perfecto, pero cuando tenemos el corazón correcto, nuestro Dios Todopoderoso, el que tiene toda autoridad, se encarga de lo que hacemos.  Aun cuando el mundo diga que no se puede y que las cosas están difíciles, si tienes corazón correcto, ten la seguridad en tu espíritu que Dios seguirá abriendo puertas a tu favor.
Para ser agente de transformación, tienes que tener el deseo de tener éxito para Dios.  Si tienes el corazón correcto, cuando logras las bendiciones, reconoces que es Dios en tu vida.  Esto es lo que busca Dios; corazones correctos para exhibir Su gloria.
No le tengas miedo al éxito.  Con tu éxito y el corazón correcto, el único que recibe honra y gloria es nuestro Señor Jesús.  Dios no está buscando corazones perfectos, sino corazones útiles que quieran exhibir Su gloria.

VENIALES Y CAPITALES?

Colosenses 2:13 Reina-Valera 1960 (RVR1960) 

Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados. 


La Biblia nos enseña que la paga del pecado es la muerte, y si lo nota, no hace diferenciación de pecados, no los categoriza y no los pone unos por encima de los otros, ni nos dice que hay unos peores que los otros, simplemente el pecado nos pone en riesgo de morir eternamente. 

Es un hecho que conocemos que hay 7 pecados capitales o pecados mortales, pero eso no está fundamentado en la Biblia, fueron decretados por el Papa Gregorio Magno en el siglo sexto, ya que la humanidad se encontraba hundida en el oscurantismo y la ignorancia total, las personas actuaban sin conciencia sin saber que todo lo que hacían era deleitarse en los placeres carnales y arriesgar su vida eterna, mas no podemos decir que son estos 7 pecados sean los únicos que nos pongan en riesgo de morir. 

Debemos ver el enfoque de su efecto final, la muerte, eso nos lleva a entender que para Dios un mentiroso es igual que un asesino y que todos tenemos la necesidad de Jesús para poder ser limpios ya sea de una mentira o del mas cruel de los asesinatos, pero sabe, el perdón de Dios tampoco tiene medidas, eso quiere decir que así como nosotros no podemos defender nuestro pecado y decir que es menor que el de otros, Dios tampoco se jacta de haber perdonado a unos mas que a otros, Él simplemente dio a su Unigénito para salvarnos a todos aquellos que le recibamos como nuestro Señor y Salvador y pongamos concientemente nuestro pecado delante de Él. 

La Biblia nos enseña que nacemos muertos en espíritu y nos enseña que adicionalmente nuestro pecado cotidiano nos mantiene en esa condición, nos mantiene atados a la tierra por medio de nuestra carne y esto no se refiere a los pecados que tengan que ver directamente con ella, sino a nuestra naturaleza humana que nace y muere en la tierra y nunca la dejará. 

Pero piénselo de esta manera, Dios siempre nos ha enseñado que en su presencia las cosas son mejores, de hecho la Biblia declara que en su presencia hay plenitud de gozo, y por tal oraciones como le famoso Padre Nuestro, empiezan reconociendo el lugar donde Dios habita y nos anima a subir a la presencia de Dios donde todo es perfecto en vez de atraerlo entre nosotros en medio de la inmundicia en la que vivimos y para ello necesitamos suplir con la condición del Reino de los Cielos, la santidad.

ÉXITO

En nosotros tiene que haber deseo de tener éxito. Hay personas que uno escucha hablando y te hacen pensar dónde está su deseo de tener éxito. Las iglesias se han encargado de predicar pensamientos de derrota, de frustración, mensajes que alteraron la mente de los cristianos. Como iglesia, debemos erradicar los pensamientos de derrota y levantar el entendimiento de lo que dice la palabra acerca de las bendiciones, los beneficios de la prosperidad y la sanidad que Dios tiene para nosotros.
En nosotros tiene que haber deseo de éxito, de prosperar, de bendición. Si una persona está enferma y no tiene el deseo de sanarse, Dios no puede hacer nada por esa vida. Una persona que tiene talentos y no tiene el deseo de sacar el mejor provecho de ellos, nada sucederá en su vida.
El mundo sigue adelante y deslumbra por la gente que tiene éxito. Muchos pagan cientos de dólares por ir a ver un espectáculo de un artista de televisor, porque se presenta con éxito. Vemos las premiaciones a los artistas destacados y pasamos horas frente al televisor viendo su éxito. Nos deslumbramos por sus historias de éxito, por la apariencia de éxito.
Los cristianos tenemos que aprender que el éxito tiene que ser visible. Cuando quieres ser una persona de éxito para Dios, tienes que dejar de ser tímido y salir del anonimato. Las personas pueden distinguir cuando a alguien le van las cosas bien y cuando le van mal. Todos conocemos personas que creemos están bien, pero los escuchamos decir o hacer cosas que nos dejan saber que están mal. En la calle podemos distinguir a una persona exitosa, por como se conduce, como se ve y como habla.
Tenemos que entender que tu éxito no solamente se tiene que ver, sino que Dios lo quiere mostrar. Dios quiere mostrarte ante el mundo, sano, bendecido, con una mente clara, con un propósito definido y con autoridad.
¿Sabes que hace falta para que tus familiares se salven? Que te muestres ante ellos con éxito. ¿Sabes lo que necesitas para que en el trabajo no te vean como el cristianito que siempre está diciendo cosas de la Biblia? Que te presentes ante ellos con éxito. Dios quiere que tengas una vida visible de éxito y si quieres ser un agente de transformación en ti tiene que estar el deseo de prosperar.
Hay muchos jóvenes que tienen más talento que los famosos de hoy en día, pero el que tiene influencia sobre ellos es aquel que está en los medios, el que vende millones de discos. Estos famosos son agentes de transformación y de esa manera Dios quiere que seas agente de transformación.
Esto no significa que ahora tienes que tener éxito como los del mundo, pero sí tienes que entender que lo que Dios quiere hacer contigo es algo visible. Dios hizo visible a todos los hombres y mujeres que  levantó. Por ejemplo José, tenía el carácter necesario, era firme en sus decisiones, firme en sus convicciones y vivía con fe, aun en medio de las peores circunstancias. Sabemos que por estas características el final de José sería exitoso y sería una exhibición de lo que Dios había hecho con su vida.
Dios y el mundo miden el éxito de manera diferente. El mundo mide el éxito por el dinero, las posesiones, los logros, el acceso, mide el éxito únicamente por lo que se ve. Hoy sabemos que ese éxito, no lo es todo.  Así como el Señor le dijo a Samuel en, 1 Samuel 16:7, Dios no mira el éxito por la apariencia del hombre, sino por su corazón.

BUSCANDO....

Me ha pasado en varias oportunidades el releer un pasaje y que adquiera un nuevo significado para mi vida. Probablemente las veces anteriores no estuve muy demasiado atenta, quizás porque he ido a la Palabra con liviandad, como quien lee un diario de noticias.

Esa misma actitud liviana se repite en el resto de nuestra vida cristiana, porque estamos ocupados, apurados, atariados, cansados.

Pero cuando los problemas son mayores o la desesperación ya nos ha ganado, vamos en búsqueda de la respuesta de Dios y queremos que nos ayude con nuestras particularidades.

Así me sucedió cuando me asaltó una angustia vieja y un pasaje del libro de Deuteronomio me recordó aquello que sé pero que olvido frente a los problemas del diario vivir.

El mensaje principal es claro y contundente: si buscamos al Señor, lo hallaremos. Tan simple y rotundo como eso… y tan difícil que se nos hace! Pero si desmenuzamos este pasaje, podemos encontrar detalles nos muestran la manera de hacerlo.

El pasaje comienza diciendo “Mas si desde allí..”. Examinemos donde estamos parados. Esto se refiere a cualquier posición: quizás nos toca vivir en un lugar lejos de nuestra familia, o estemos atravesando una situación económica difícil. Quizás nuestro esposo/a no comparte la fe, o la enfermedad nos aqueja hoy o desde hace ya mucho tiempo… Cualquier circunstancia, cualquier tormenta o desde la confortable comodidad del ser tibios. Pensemos en nuestra posición y Desde allí, debemos buscar al Señor para que Él se convierta realmente en el Rey sobre toda circunstancia. Para que Él sea plenamente el Rey en nuestra vida.

Si desde allí lo buscamos, lo hallaremos… pero esa búsqueda debe ser con todo nuestro corazón y nuestra alma! Desde las entrañas y con las mismas ganas que empeñamos en aquello que nos gusta, que anhelamos. Si invirtiéramos en nuestra comunión con el Señor el mismo tiempo que invertimos en nuestro celular, internet, televisión, futbol, etc, la relación sería otra. Buscarlo sedientos y hambrientos. Buscarlo primeramente. Buscarlo, buscarlo y buscarlo.

¿Queremos encontrarnos con Dios? Allí, donde estemos parados, debemos empeñar nuestro corazón y nuestra alma en ello. Debemos dejar de pensar en la circunstancia y quizás apagar el celular o la tele y arrodillarnos. Cuando nos acerquemos al Padre, seguramente Él estará con los brazos abiertos y nos dirá “te estaba esperando”.

CAMBIOS EN LA FAMILIA

Aunque el debate acerca de los cambios que se están produciendo en la familia y en los valores de las personas parezca alejado del tema de la globalización, lo cierto es que no lo está.

La familia tradicional evoluciona rápidamente como consecuencia del nuevo papel que la mujer ha empezado a desempeñar en la sociedad. La exigencia de una mayor igualdad entre los sexos es una característica actual que contrasta con todas las anteriores sociedades registradas a lo largo la historia de la humanidad. Esta revolución femenina global no sólo afecta a la familia sino también a la vida social en general, desde el mundo laboral hasta el ámbito de la política. Actualmente la mujer sólo es reprimida en aquellos países controlados por gobiernos autoritarios o por grupos religiosos fundamentalistas. En todos los demás se está dando un intenso debate sobre la igualdad sexual y el futuro de la familia.

Durante la Edad Media en Europa el matrimonio no solía realizarse en base al amor que existía entre la pareja sino para transmitir adecuadamente las propiedades de los padres. Ni siquiera se consideraba que el amor sincero era necesario en la vida matrimonial. La mujer se concebía siempre como una propiedad o un vasallo más del marido o del padre. Esta desigualdad en el trato entre hombres y mujeres se extendía también a la vida sexual. La sociedad medieval veía con buenos ojos que el varón tuviera sus aventuras amorosas con otras mujeres, pero no toleraba la misma actitud de parte de la esposa. 

El doble rasero sexual respondía a la necesidad de continuar el linaje a través de los hijos propios y asegurar así la herencia familiar. De ahí que la exigencia de castidad y fidelidad sólo se impusiera al sexo femenino. Como en esta familia tradicional la sexualidad se entendía sólo en función de la reproducción, era frecuente que las mujeres tuvieran alrededor de diez embarazos durante su vida. Todas estas costumbres familiares se prolongaron hasta bien entrado el siglo XX.

No obstante, durante las últimas décadas estamos asistiendo a un cambio decisivo en la familia y en la vida sexual del mundo occidental. Hoy la sexualidad se ha separado de la reproducción; la familia ha dejado de ser una unidad económica, mientras que el amor se ha convertido en el principal vínculo de unión entre el hombre y la mujer. En algunos países más del 30% de los nacimientos ocurren fuera del matrimonio. Muchas parejas habitan juntas sin estar casadas y, a la vez, aumenta el número de personas que viven solas. Es verdad que la gente se sigue casando, aunque también es cierto que el divorcio es cada vez más frecuente. Antes los niños representaban un soporte económico para la familia, hoy constituyen un gasto importante para la economía del hogar. Según se afirma, la familia actual se habría convertido en una “institución concha” que por fuera tiene el mismo aspecto que en el pasado pero, por dentro, habría cambiado notablemente, volviéndose inadecuada para la tarea que hoy está llamada a cumplir:

“Hemos de reconocer la gran transición que supone esto.  Emparejarse y desparejarse  son ahora una mejor descripción de la situación de la vida personal que  el matrimonio y la familia . Es más importante para nosotros la pregunta “¿tienes una relación?” que “¿estás casado?”. La idea de una relación es también sorprendentemente reciente. En la década de los sesenta nadie hablaba de  relaciones ” (Giddens, A.,  Un mundo desbocado,  Taurus, Madrid, 2000: 72).

La realidad que se nos plantea hoy a los cristianos que seguimos creyendo en la familia, tal y como ésta se entiende a la luz de la Palabra de Dios, es que tanto la llamada “familia tradicional” como las recientes y efímeras “relaciones de pareja”, no están inspiradas en los principios bíblicos. Aquellas relaciones de familia que no se fundamentan en el amor, el respeto, la igualdad, el compañerismo y la obediencia a la voluntad de Dios expresada en el Nuevo Testamento, constituyen proyectos totalmente ajenos a la idea de familia cristiana. Desde la perspectiva de la fe no es posible admitir la discriminación por razón del sexo en el seno de la vida familiar. Delante de Dios no hay varón ni mujer sino que todos somos iguales. La fidelidad matrimonial es entendida en el Evangelio como una exigencia para ambos cónyuges por igual. ¡No sólo para la mujer!

La reciente alternativa de las llamadas “familias de hecho” de carácter homosexual, tanto si se trata de parejas masculinas como femeninas, no posee ningún apoyo bíblico; más bien al contrario, se trata de relaciones claramente condenadas en la perspectiva cristiana. No se deben confundir ese tipo de parejas con el concepto bíblico de matrimonio ya que se trata de dos cosas absolutamente diferentes. La presión social y mediática ejercida actualmente por los grupos homosexuales ha contribuido a crear la idea de que todo lo relacionado con el sexo está envuelto por una aureola de amoralidad. Nada se considera negativo y lo más correcto parece que sea la permisividad social. Esto ha contribuido a crear el sentimiento de que todo tipo de prácticas sexuales son algo normal que debe ser aceptado por la sociedad.

Aunque muchos sociólogos opinen que durante la globalización la familia esté condenada a desaparecer o al menos este concepto clásico deba ampliarse a otros tipos de convivencia, lo cierto es que una cosa es la familia formada a partir del matrimonio heterosexual, entre un hombre y una mujer unidos por el vínculo del amor, y otra cosa distinta es la relación que se da en las uniones homosexuales. No hay que confundir los términos. Tampoco creo que la familia clásica vaya a desaparecer de nuestro mundo, aunque eso sí, seguramente tendrá que subsistir al lado de otros modos de convivencia.

Ante semejante realidad, las familias cristianas que viven su fe y educan hijos para la gloria del Señor, están contribuyendo de forma decisiva a la extensión del reino de Dios en la Tierra. El testimonio de la vida en el hogar cristiano, de la unión estable del matrimonio y del cuidado de los hijos seguirá siendo en el mundo global como un faro que iluminará las vidas de muchas personas para conducirlas a los pies de Jesús.

Algunos autores han señalado que después de la “sociedad industrial” y de la “sociedad del ocio” en los países occidentales, este mundo parece haber entrado en una nueva fase a la que se ha denominado la “sociedad depresiva” (Anatrella, T.,  Contra la sociedad depresiva,  Sal Terrae, Santander, 1995). Esta última sociedad se caracterizaría por el aumento de las enfermedades depresivas y por el consumo de ansiolíticos. En pleno proceso globalizador, muchas personas parecen haber puesto toda su confianza en la ciencia y la tecnología, a la vez que han procurado librarse de Dios. Esto ha provocado la aparición de diversas ideologías alienantes que han eliminado toda esperanza en el ser humano.

Sin embargo, en la actualidad el atractivo del progreso parece haberse desvanecido arrastrando al hombre a una profunda crisis moral. Hay gente que se da cuenta hoy de que ya no posee razones para seguir viviendo. Personas a las que nada les satisface y no encuentran complacencia en vincularse a ninguna institución social, política o religiosa. No quieren saber nada de familia, de matrimonio, de iglesia o de cualquier otra asociación. Proliferan los individuos aislados que llevan una vida atomizada. Viven para sí mismos en la búsqueda de una libertad narcisista que les conduce con frecuencia a la depresión. 

Tal situación refleja una profunda crisis moral que sería una consecuencia más de la pérdida de fe del hombre contemporáneo, de su profundo empobrecimiento interior. Cuando se intenta eliminar a Dios de la propia existencia, también se vienen abajo el respeto al otro, el interés por la verdad, la búsqueda del bien común y el amor al prójimo. Este es el drama principal de la actual sociedad depresiva. En el momento en que lo que realmente da sentido al hombre, como la fe y la moral, se borran o se circunscriben a la esfera de lo privado, la persona pierde confianza en sí misma y se inicia un descenso por la pendiente de la depresión.

Por eso crece la melancolía en nuestras ciudades y prolifera la búsqueda ansiosa de todo tipo de terapias pseudorreligiosas. Si no se tienen ideales ni creencias, la vida psíquica de las personas carece de una base sólida en la que apoyarse para vivir en sociedad. La duda existencial puede llevar también a la depresión y ésta es capaz de hundir a la persona en la inactividad o puede provocar conductas de desafío o de desesperación. De ahí la relevancia actual y la necesidad del cristianismo que fomenta la riqueza y el diálogo interior. La oración del creyente no sólo es comunicación con Dios sino también con uno mismo. Esta práctica refuerza la personalidad proporcionando dinamismo y, sobre todo, enriqueciendo espiritualmente la vida humana.

AMIGOS DE DIOS

Isaías 61:1-4 Reina-Valera 1960 (RVR1960) 

El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados; a ordenar que a los afligidos de Sion se les dé gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados árboles de justicia, plantío de Jehová, para gloria suya.Reedificarán las ruinas antiguas, y levantarán los asolamientos primeros, y restaurarán las ciudades arruinadas, los escombros de muchas generaciones. 

A veces me abruma el pensar que el único tema de conversación entre Dios y nosotros, somos nosotros mismos, y aún así nos decimos amigos de Dios y nos consideramos íntimos con Él, siendo que no le conocemos y no sabríamos de qué otro tema hablar con Él si nos encontráramos cara a cara, lo ha pensado? Y esto no se lo digo con el afán de hacerle sentir mal o cuestionar su fe, solo se lo comento pues es el punto de partida que tengo que tomar para poder llegar a hacerle reflexionar acerca de la cita del día de hoy. 

Otra de las cosas que nos suceden, es que normalmente solemos entablar monólogos con Dios, donde nosotros hablamos y se supone que Él escucha y lejos de responder tiene que callar y hacer, pero no hablar y mucho menos opinar, y sucede que las personas tienen un problema con escuchar su voz, pues no tienen idea de qué es lo que Dios les hablaría, no se imaginan el motivo o la razón por la cual habría de hacerlo, fuera de "si", "no", y "tengo algo mejor para ti", pero de nueva cuenta todo girando alrededor de nosotros. Y aclaro, Dios hizo todo por nosotros, para que vivamos para Él, es decir, en Él encontramos nuestro propósito y cuando lo entendamos y lo empecemos a llevar acabo (el propósito) es cuando empezaremos a recibir no solo lo que queremos, sino todo lo que necesitamos para llevar una vida gloriosa. Pero esto no va a suceder por medio de pequeñas oraciones pensadas en las que solo pedimos y solo pensamos en lo que queremos, en lo que nos acomoda o en lo que nos hace sentir cómodos, por el contrario, esto sucede cuando nosotros nos disponemos primeramente a escuchar la voz de Dios y luego a obedecerla, para que por medio de ello, nos convirtamos en esa respuesta que las personas están esperando. 

Es decir, Dios nos puede hablar audiblemente, nos puede hablar por medio de pensamientos, definitivamente nos hablará por medio de la Biblia, pero siempre y creo que mas importante que todo, nos hablará por medio de otras personas que vengan a dar respuestas concretas a situaciones específicas que solo Él y esas personas saben y que pareciera un acto de magia que puedan venir a resolver. Se me eriza la piel de emoción al leer la cita de hoy, vea como todo lo que les puede suceder a las personas está incluido en ella y como todo lo que tenemos que entender como hijos de Dios es que Él está sobre nosotros, nos habla y nos lleva a actuar para ser esa respuesta que el mundo necesita, aquellos que no conocen a Dios y que nunca han tenido esa relación estrecha, personal y cara a cara con Él. 

Dios se manifiesta por medido de sus hijos y somos aquellos que hemos declarado y confesado que somos sus hijos, los instrumentos para gobernar la tierra, para ser el medio por el cual Dios hable respuestas específicas a cada persona y luego en nuestra forma de vivir mostremos su gloria, pues cuando estemos dispuestos a mostrar su gloria, será cuando esta sea manifestada en nosotros, no solo en abundancia física, sino en todo don espiritual y toda acción que nos lleve a reflejarle a Él y que las demás personas sobre la tierra queden maravilladas con la luz de Dios y todo lo que muestra por medio nuestro. 

Por tanto, si usted espera respuestas de Dios, si usted espera manifestaciones de poder de parte de Él, si usted espera su favor, lo primero que tiene que hacer es estar dispuesto a manifestar su gloria por medio de lo que esta cita nos invita, para que una vez dispuesto, sea su voz (la de Dios) la que le hable constantemente y le lleve a servir a otros de acuerdo a nuestro diseño y reciba todo lo que anhela y mas, simplemente por gobernar y funcionar de acuerdo al Reino de Dios y el plan que previamente trazó para usted y para mi, que le parece?

AUTORIDAD Y RESPONSABILIDAD

Dios quiere que tú seas un agente de transformación.
Tenemos que aprender a tener orgullo por lo que hacemos, orgullo por nuestro trabajo. Dios puede utilizar nuestro trabajo para su gloria y honra. Dios puede usar a cualquier persona para cualquier propósito, él puede hacer algo grande con cualquier persona.
Dios sí quiere usarte, y quiere hacer algo grande contigo.
Desde nuestra posición, desde donde estemos, Dios nos puede prosperar sobrenaturalmente.
A nivel mundial, vemos lo que está sucediendo en la economía; pero los que hemos creído en el Señor, tenemos una fe diferente. Estamos cimentados, no en la economía del mundo, sino en la palabra de Dios, y en los principios espirituales que no dejan de funcionar cuando se trata de nuestras finanzas.
No menosprecies lo que haces, ni el lugar donde estás, porque es con eso que Dios puede hacer su diferencia.
Es necesario que erradiquemos la deuda y la pobreza de nuestras vidas. Los pensamientos de pobreza, por lo general, son inculcados en nosotros en nuestra niñez, en nuestro crecimiento.
Tenemos que aprender a tener autoridad, que va de la mano con la responsabilidad. Si no quieres tener la responsabilidad de tener autoridad, desde ahora debes saber que estás descalificado para ser un agente de transformación. Es necesario que tengamos autoridad; autoridad de la palabra, autoridad sobre nuestras decisiones, sobre nuestros pensamientos, sobre lo que hacemos y sobre lo que no hacemos.
Cuando nos conducimos con la autoridad que Dios ha puesto en nuestra vida, esto hace la diferencia en nuestra vida.
Es necesario que hables la palabra de Dios con autoridad. Que, cuando veas una noticia negativa, puedas pararte con autoridad y decir: La palabra de Dios dice… Que cuando alguien te diga algo negativo de tu familia, tú puedas decir: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo tú y tu casa. Que, cuando el médico te dé un mal diagnóstico, puedas decir con autoridad: Poned las manos sobre los enfermos y sanarán; y poner tus manos sobre ti mismo y declarar sanidad en oración.

EL AMOR DE LA CRUZ

Hay quienes interpretan el acto de la cruz, el milagro de la salvación, únicamente para cuando partamos de este mundo y pasemos a morar con nuestro Señor. Definitivamente, esto es una gran promesa y trae paz a nuestras vidas, pero el acto de la cruz fue algo más trascendente que únicamente asegurarte la vida eterna; también te asegura el presente y cómo vivir en la libertad a la que hemos sido llamados.
Pablo hace una declaración muy importante y poderosa que demuestra el verdadero milagro de la cruz. Pablo nos dice que, en la cruz, se anuló el acta de decreto que estaba contra nosotros. Acta de decreto es un término legal, una sentencia, algo que ha sido establecido que tiene que pasar en tu vida.
En Colosenses 2:14-15, Pablo nos dice: Él anuló el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, y la quitó de en medio clavándola en la cruz.Y despojó a los principados y a las autoridades y los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz.El enemigo hizo un espectáculo público, donde la gente vio como hirieron y maltrataron a nuestro Señor. Al hacer esto, el enemigo pensó que había ganado, pero la biblia nos demuestra que este acto era el plan divino para darnos la salvación y hacernos libres.
En tu vida, en la vida de cada uno de nosotros, había unos decretos que iban en contra del propósito de Dios para nuestra vida. Con su sacrificio, Jesús quitó del medio todo aquello que decía que no ibas a triunfar y que en tu vida tenias que vivir en la maldición de tus generaciones. Puede ser que estés en la etapa de querer lograr algo, pero algo se pone en el medio y te detiene. Por esto, tienes que creer en el milagro de la cruz, donde hace dos mil años atrás todo aquello que estaba en tu contra y detenía el plan de Dios sobre tu vida, Él lo anuló. Desde antes que nacieras y tomaras la decisión de aceptar a Jesús como tu Salvador, Él había ya declarado que eres completamente libre.
Puede ser que has sentido una parálisis en tu matrimonio, en tu familia y del propósito de Dios para los tuyos, pero todo esto ha sido cancelado y eliminado en el nombre de Jesús. Toda barrera que hay entre el destino, el propósito, el plan de Dios para ti y los tuyos, es cancelado en el día de hoy. Dios te da la victoria y verás la mano poderosa de Dios obrar en favor de tu vida y de los tuyos.

EL SECRETO DE LA FELICIDAD

Uno de los problemas que hay en la familia hoy día es que la sociedad nos enseña a buscar la gratificación personal. Esperas que la otra persona te haga feliz en todo momento, tiene que complacerte o si no te vas. Así mismo, la persona que solo espera algo a cambio de ti, llegará el momento en que tienes que dejarla ir.
Es imposible tener cualquier relación mientras lo único que se busque sea la satisfacción personal. No puede haber una familia correcta cuando la prioridad de cada individuo es la satisfacción personal, antes que el sacrificio.
Los padres se sacrifican por sus hijos; los esposos, las esposas, los hijos tienen que sacrificar algo. No todo puede ser para los hijos, cuando son pequeños se les da todas las atenciones necesarias, pero durante su crecimiento se les debe enseñar que los padres necesitan su espacio. Mientras más temprano lo entiendan, mejor. A los hijos hay que enseñarles a hacer las cosas por sí solos, a luchar, a trabajar; así crecerán siendo hombres y mujeres de provecho para la sociedad. Enséñales a hacer sacrificios, a ganarse su propio dinero, a diezmar, a ofrendar, a regalar y que no todo es para ellos y por ellos.
De igual manera, en relaciones de pareja. No eres digno de estar en una relación si no estás dispuesto a hacer sacrificios. No hay tal cosa como: Hoy me sacrifico por ti y mañana tú lo haces por mí, porque entonces sería una negociación. Un sacrificio es saber lo que tengo que hacer, en el momento que me toca, sin esperar que algún día me compensen. Sacrificarse es hacer algo, simplemente, porque es lo que tienes que hacer.
Por eso es que hay gente infeliz, porque el verdadero amor sabe que la felicidad no está en que te hagan feliz, sino en tú hacer feliz a la otra persona. El ejemplo perfecto del verdadero amor es Cristo; nadie puede amar como él lo hace. Cristo fue el único que estuvo dispuesto a dar su vida por ti. Él le dice al hombre que ame a su esposa, como él ama a la iglesia, tanto que estuvo dispuesto a morir por ella.
Si analizas, no hay manera de que una pareja se entienda mutuamente, y debes entender que Cristo, sin entendernos, se sacrificó por nosotros. Él pudo experimentar ese amor por que se dio por completo. En ninguna relación debes irte lleno a la tumba, deberías irte con una sonrisa y decir: Lo di todo, hice todo lo que pude hacer, lo intenté todo, me esforcé más allá de mis fuerzas. Solo ahí puedes decir verdaderamente: Áme, no porque me amaron, sino porque amé con todo.